El loto es un elemento sagrado del budismo y otras religiones y culturas orientales, evocador de sabiduría y de serenidad. Magnifica, suntuosa y acuática, la flor de loto encarna un símbolo de pureza, armonía, belleza, abundancia, riqueza y de florecimiento espiritual…
Doce flores de loto rodean el ícono de Pentecostés que es redondo. El círculo de los doce apóstoles, iguales, en el cual está Pedro a la izquierda y Pablo a la derecha, misioneros. María quien recibió el Espíritu Santo en el momento de la encarnación acompaña a los doce en su proceso espiritual. En Pentecostés la Santísima Trinidad viene a habitar en las personas: «Aquel día comprenderan que yo estoy en mi Padre y ustedes en Mí y Yo en ustedes» (Jn 14, 20).
Este ícono de pentecostés es eminentemente misionero y quiere celebrar la presencia del Espíritu en la Iglesia y como se extiende a otras religiones y culturas en las cuales reconocemos las “semillas del Verbo” en todo lo bueno y verdadero que se halla en ellas.
En este Pentecostés , abiertos a ser hombres y mujeres nuev@s , pedimos al Señor que derrame los dones del Espíritu sobre toda la tierra, y nos permita caminar en la unidad como verdader@s herman@s para así, desde nuestra realidad ser testigos de la paz, la unidad, la esperanza y el amor.
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Equipo de Redacción Blog Smé Honduras
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