“En memoria de ella”
Marcos 14:1-15
En memoria de ella.
Escribas y sacerdotes conspiran fraguando mentiras,
“glotón y borracho” podrían ser argumentos.
Muerte es el castigo que seguramente
alcanzar podría este tipo de delincuente.
En memoria de ella.
Sin embargo, es fiesta de libertad,
pan de presteza que no supo leudar,
fermento de fiesta que leche y miel auguró,
bataholas peligrosas si el complot no es seguro.
En memoria de ella.
Es en casa de pobres:
de aflicción endulzada con dátiles,
de higos que no maduran,
¡donde la gracia se transfigura!
En memoria de ella.
Ahí se rompe el cacharro
que unge para muerte al acusado,
incendiando de perfume de nardo
aquel santuario de egoísmos purgado.
¡En memoria de ella,
fue la eucarística orden!
Honrar con ello la memoria
por cuanto es importante la historia
que no repita traicionero desdén.
En memoria de ella…
suena a “teología patas arriba”:
donde el amigo vende una vida
y el esclavo cántaro en alto
de mujer hace trabajo.
En memoria de ella:
Despropósito para la ortodoxia,
de violentos que no han comprendido:
que herir adversarios no es el camino
eucarístico del que exige: “en memoria de ella”.
Dan González Ortega, México
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